Explorando la alimentación saludable para adultos, este artículo ofrece claves para envejecer con dignidad y salud.
En un mundo donde la longevidad es cada vez más una realidad, es crucial abordar la alimentación saludable como un pilar fundamental para los adultos mayores. A medida que nuestra población envejece, los desafíos nutricionales se vuelven más complejos y demandan una atención especializada. VRIM, líder en servicios de telemedicina, se dedica a promover una vida plena y saludable en la tercera edad, reconociendo que una dieta equilibrada es clave para envejecer con dignidad y bienestar.
Demografía y Nutrición
La población de la tercera edad en México va en aumento. Tan solo los datos del INEGI confirman que durante 2020 se contabilizaron 15.1 millones de personas pertenecientes a este sector. Los datos igualmente revelan que por cada 10 niños y niñas, existen 5 personas de la tercera edad. A su vez, es bien sabido que el desarrollo económico y social de un país también se determina a partir del buen estado nutricional de sus ciudadanos. Es por ello que este contenido está enfocado en comunicar las características ideales de una alimentación saludable para adultos y así envejecer con dignidad.
El envejecimiento y sus cambios corporales
Según la Organización Panamericana de la Salud, se entiende por adulto mayor a aquella persona que rebasa los 60 años de edad. Una vez entrados en esta etapa, el organismo comienza a sufrir transformaciones biológicas, psicológicas y sociales.
Conforme vas envejeciendo, los vasos sanguíneos pierden elasticidad, las arterias acumulan más grasa, la frecuencia cardiaca se reduce como un efecto del endurecimiento del corazón a la vez que los procesos del sistema nervioso se ven disminuidos provocando problemas de la presión arterial.
Como influyen otros factores en la nutrición de los adultos mayores
El estado físico, los medios materiales como el acceso a una cocina e inclusive contar con una placa dental, así como los aspectos psicológicos y sociales influyen de manera relevante en el estado nutricional.
La desnutrición está asociada con una tasa de morbilidad elevada, es decir, con enfermedades que surgen frecuentemente en un solo sector. Estos padecimientos ocurren principalmente en estancias hospitalarias prolongadas, provocando los siguientes trastornos:
•Trastornos de deglución: alteraciones en el proceso de ingerir alimentos y tragarlos.
•Xerostomía: cuando las glándulas salivales no producen suficiente saliva.
Recomendaciones para una alimentación saludable en adultos mayores
La falta de hábitos nutricionales saludables en este sector poblacional favorece el inicio de enfermedades crónicas no transmisibles. Es por ello que los siguientes alimentos son vitales para procurar la calidad de vida durante el envejecimiento.
1. Líquidos
Se recomienda una ingesta diaria de un litro de agua o de 30 miligramos de agua por kilogramo en la persona.
2. Fibra
¿Recuerdas cómo las arterias acumulan más grasa conforme vas envejeciendo? Pues la fibra ayuda a disminuir la grasa y el azúcar a la vez que estimula el proceso gastrointestinal y produce saciedad.
3. Reducción de sodio
La disminución de sodio se puede llevar a cabo evitando productos enlatados, salchichas, jamón, sal de ajo, queso, condimentos procesados, papas fritas, etcétera. Adquirir este hábito ayuda a reducir las posibilidades de sufrir accidentes cerebrovasculares, hipertrofia ventricular izquierda y la proteinuria.
4. Reducción de azúcares
Debido a que en esta etapa el páncreas segrega menos enzimas que ayudan a descomponer las grasas, proteínas y carbohidratos a la vez se ven reducidos los receptores de insulina, las personas de la tercera edad se vuelven más propensas a padecer diabetes, es por ello que el consumo de azúcar debe mantenerse bajo control.
5. Consumo de vitamina D
El consumo de vitamina D será de gran importancia debido a que lleva a cabo la relevante función de absorber el calcio de manera más eficaz. Asimismo, ayuda a que el sistema inmunológico funcione de manera más eficiente a la vez que regula la presión arterial y la función cerebral.
Conclusión:
La alimentación saludable para adultos mayores es más que una necesidad; es una forma de envejecer con gracia y dignidad. Con el apoyo y los recursos que ofrece VRIM, cada adulto mayor tiene la oportunidad de disfrutar de una calidad de vida óptima, respaldada por un plan nutricional adaptado a sus necesidades individuales y un soporte médico siempre disponible. Envejecer no significa renunciar a la salud o al bienestar; con las estrategias adecuadas y el apoyo correcto, cada año puede ser un testimonio de vida plena y satisfactoria.
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Bibliografía
- https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/aproposito/2021/EAP_ADULMAYOR_21.pdf
- https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?pid=S0717-75182006000500006&script=sci_arttext&tlng=e
- https://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-70632017000300199
- https://www.scielosp.org/pdf/rpsp/v19n5/a05v19n5.pdf