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En un mundo donde los gastos médicos pueden ser una preocupación, descubre cómo un crédito para servicios médicos puede ser una solución vital para tu salud y bienestar financiero.
En el mercado mexicano existen muchos tipos de créditos. Existen aquellos que nos ayudan a vivir mejor o disfrutar experiencias, por eso, en la actualidad conocemos los que son de carácter automotriz, bancario y personal.
En esencia, cuando alguien habla de un crédito se refiere a un préstamo. Una forma segura y fácil de obtener dinero para cumplir objetivos personales, de negocios o de salud.
En términos más concretos, un crédito es una operación financiera donde un agente llamado “acreedor” presta una cierta cantidad de dinero a una persona. En esta operación, el sujeto que efectúa el préstamo pide que su dinero esté de vuelta en un lapso de tiempo definido, y el beneficiario se compromete a devolver lo solicitado.
Cabe mencionar que en este tipo de operaciones se manejan los llamados intereses, y se refiere al precio a pagar por utilizar un financiamiento.
Ahora bien, un crédito para servicios médicos únicamente se enfoca en otorgar un préstamo para pagar los servicios de un doctor o un hospital. Así que es una buena opción para una persona o una familia que busca resolver una emergencia médica o un tratamiento.
En pocas palabras, un crédito para servicios médicos está orientado a financiar cualquier procedimiento médico, desde casos pequeños hasta situaciones graves.
En muchas ocasiones un crédito para servicios médicos se solicita con facilidad, siempre y cuando el Buró de Crédito del beneficiario esté en orden.
Las empresas que ofrecen un crédito para servicios médicos se fijan que los solicitantes tengan buenas referencias y posteriormente les enseñan una base de datos que resguarda hospitales y doctores afiliados.
Incluso, se pueden financiar a pacientes que ya tienen un seguro médico, en estos casos solo entran como un coaseguro.
Los montos del préstamo de un crédito de salud varían de acuerdo al servicio médico solicitado, sin embargo, el gasto promedio para una cuestión hospitalaria en México oscila entre los 30 y 70 mil pesos.
Por lo que se refiere a las tasas de interés, estas dependen de cada empresa. Por ejemplo, puedes pagar entre el 30 y 50 % en seis meses. En cuanto a los pagos, un acreditado puede cubrir su préstamo al recibir un cargo a su tarjeta de crédito, por medio de transferencias o depósitos en el banco.
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